Queremos volar contigo
En WINDOBONA no sólo te ofrecemos la mejor tecnología, sino el mejor equipo humano. Vivimos nuestro trabajo con pasión y eso se nota.
No lo decimos nosotros, sino nuestros clientes. Ya son miles los voladores que se han lanzado a probar la increíble sensación de volar en nuestro simulador de paracaidismo y sus recomendaciones nos avalan.
¡Conócenos más de cerca!
Paloma Granero
Directora General
No se me ocurre nada mejor que acercar al público uno de los mayores sueños de la humanidad, volar. WINDOBONA es el lugar donde puedes cumplir ese sueño.
Elisabet Sáez
Directora de Marketing
¿Puede haber algo más gratificante que acercar a la gente el sueño de volar?
Mi profesión se ha convertido en mi pasión y ahora también es la tuya. ¿Me equivoco?
Pablo Mendo
Financiero
En Sevilla nací, en Sevilla estudié y trabajé y el “SALTO” a Madrid di
para gestionar los sueños que “VUELAN” hacia WINDOBONA Madrid.
Vicente Sanseroni
Jefe de instructores
Lo bueno que tiene este deporte es que nunca vas a dejar de aprender. Eso es también lo bonito de enseñar a volar. Ver la progresión del alumno y cómo consigue sus metas.
John Ospinal
Instructor
Mi pasión es volar y me gusta compartir con las demás personas la alegría de una experiencia tan única mientras les saco una sonrisa.
Alejandro Diñeiro
Instructor
Enamorado del vuelo desde que tengo uso de razón y apasionado de la gastronomía. He llegado a WINDOBONA para cumplir sueños y compartir sabores.
César Díaz
Instructor
Para mi volar es algo que se puede enseñar, pero no se puede explicar… cambia dependiendo de tu estado de ánimo, motivación y demás. Lo único que siempre es igual, es que nunca habrá una experiencia con la que se pueda comparar.
David Mochales
Instructor
Sonríe y vamos a volar. Prepárate para disfrutar de la libertad de volar. Cuerpo y mente deben estar alineados para poder disfrutar al máximo del vuelo.
Marigaby Santana
Recepcionista
Cuando empecé a trabajar en WINDOBONA no conocía nada acerca del paracaidismo indoor ni había probado la experiencia de volar. Ahora no hay quien me desenganche del túnel de viento.